NOTIVIDA, Año IV, nº 255, 13 de Noviembre 2004

Ciudad de Buenos Aires, Argentina

EDUCACIÓN SEXUAL: LOS PADRES DE FAMILIA NO ESTÁN DISPUESTOS A RENUNCIAR A LA PATRIA POTESTAD

Mientras algunos legisladores se contentan con intentar paliar la perversión de los contenidos y salvar la autonomía de los colegios de gestión privada; los padres de familia se niegan a arriar la bandera de la patria potestad. Las diferencias entre los legisladores y los padres de familia se pusieron de manifiesto en la última reunión llevada a cabo en la Legislatura porteña.

En la Ciudad de Buenos Aires el proyecto impulsado por la Sociedad de Integración gay-lésbica y presentado por los diputados kirchenistas Suppa y Kravetz y la macrista Polimeni ha suscitado fuertes polémicas por el tema de la homosexualidad. Afortunadamente, todavía genera fuertes rechazos en la sociedad que quieran inculcar a niños y adolescentes –en etapa de crecimiento, formación e identificación sexual- que pueden “optar” por ser varones, mujeres, bisexuales, gays, travestis o lesbianas.

Pero este tema, de suyo grave, sigue siendo aún el más superficial de los debates. Incluir la “perspectiva de género” y sus conceptos anejos -la libre opción sexual, la diversidad, la orientación sexual, etc.- en los programas de educación sexual que el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires implemente, es sólo cuestión de tiempo. Recordemos sólo a modo de ejemplo que en la Ciudad de Buenos Aires todos los convenios firmados para dictar los actuales talleres de educación sexual, en el marco del programa Nuestros derechos, nuestras vidas, se han firmado con organizaciones progay y proaborto.

Por otra parte, la Secretaría de Educación del gobierno porteño aclaró, desde el inicio, que el Estado va a definir los contenidos y que no va a admitir que los fije ni la ley –como intenta Suppa-, ni las comunidades educativas de cada colegio –como intenta De Estrada- (Clarín 02/11/04).

Más allá de lo que diga el proyecto de educación sexual que finalmente se sancione, darle a un estado corrompido la llave para acceder directamente a los chicos y adoctrinarlos en la materia, es sentenciar a los niños a ser pervertidos. Ese es el debate de fondo: ¿Puede este Estado intervenir directamente sobre los menores -aún en contra de las convicciones de sus padres- en cuestiones que tienen graves connotaciones morales y arrasar con la patria potestad? Por eso cuando el diputado De Estrada anunció su alternativa, la diputada Polimeni declaró en los medios "más allá de los dos proyectos, hemos obtenido una victoria: ya nadie discute que la educación sexual debe darse en los colegios, sean públicos o privados". (Diario Clarín 28/10/04)

El proyecto de De Estrada 

Lleva el nº de expediente 2720/04 y fue cofirmado por los diputados Jorge Enríquez, Juan Carlos Lynch, Jorge Mercado, Mario Morando, Diego Santilli, Silvia Majdalani, Sandra Bergenfeld  y Dora  Mouzo, (todos del Bloque Juntos por Buenos Aires); Gabriela Michetti y Marcos Peña (ambos del Frente Compromiso p/ el Cambio); Mirta Onega (Compromiso social) y Fernanda Ferrero (Unión p/ Recrear BsAs),

Si bien el art 6º le garantiza a los padres de familia que las instituciones educativas los deberán informar, acordar con ellos y recibir su conformidad  acerca de las modalidades, contenidos y metodologías; es evidente que mientras que los que concurren a las escuelas privadas quedarán amparados por el ideario y/o proyecto educativo institucional del colegio cuyo respeto garantiza el art. 5º; los que concurran a la escuela pública estarán a merced de la Secretaría de educación y no podrán eximir a sus hijos de las clases; ya que el proyecto prevé dar educación sexual como “contenidos transversales” (art. 4º) a incluir en materias tales como biología, psicología, formación ética y ciudadana, etc (quinto párrafo de los fundamentos) a partir del primer año de la escuela secundaria (art 1º).

Sin poner en tela de juicio las intenciones del autor, su natural preocupación por el proyecto de Suppa y las presiones que pudo haber recibido para impulsar este “mal menor”, creemos que este es un proyecto injustamente discriminatorio para con los más débiles y desprotegidos los hijos de los que no pueden pagar la cuota de la enseñanza privada y que avasalla la patria potestad. De sancionarse tal como se lo presentó, como dijo Polimeni, se habrá concedido la victoria a los que atacan la vida y la familia. 

El reclamo de los padres de familia

A esta altura, parecen ser pocas  las pretensiones de los padres de familia. No intentan ser los autores del proyecto, ni aspiran a que otros eduquen en la castidad, se conforman con que el proyecto sancionado, no sea obligatorio para sus hijos. Se conforman con que este Estado corrompido que afirma que “los jóvenes tienen que aprender a cuidarse”, brinde educación sexual como una herramienta para quien lo crea conveniente y renuncie a imponerla totalitariamente.

Los expositores y el público presente en la reunión especial sobre educación sexual, que organizó la Comisión de educación de la Legislatura porteña el pasado 12 de noviembre, cerrando la ronda de consultas a la sociedad civil, reclamaron educación sexual EXTRACURRICULAR Y OPTATIVA.

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NOTIVIDA, Año IV, nº 255, 13 de Noviembre 2004

Editores: P.Juan C. Sanahuja y Mónica del Río

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