NOTIVIDA, Año II, nº 77, 21 de mayo de 2002 

Buenos Aires, Argentina 

EL FEMINISMO SE MOVILIZA POR EL PROTOCOLO DEL CEDAW

El Poder Ejecutivo Nacional ha pedido dos veces, el 8 y el 30 de abril, el retiro del Protocolo Facultativo de la Convención de la Mujer (CEDAW) del Senado de la Nación. El Senado, no obstante, tiene que tratar los proyectos de retiro enviados por el Ejecutivo. Aún no lo hizo. 

El feminismo abortista insiste en que se ratifique el Protocolo, además de pedir la sanción de las leyes de Protección de Derechos del Niño/a y del Adolescente (sovietización de la familia) y de salud reproductiva, aborto encubierto (Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable). 

Para impedir el retiro del Protocolo, en estos días se han sucedido reuniones organizadas por las activistas del aborto: por las Mujeres del ARI, al mando de Elisa Carrió, por la Fundación Mujeres en Igualdad, por el FEIM, por el Foro de Derechos Sexuales y Reproductivos, etc., y se anuncia para el próximo 28 de mayo, bajo la consigna "Derechos reproductivos son derechos humanos", el Día de Acción por la Salud de la Mujer, con el apoyo del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.  

María José Lubertino, del Instituto Social y Político de la Mujer, amenaza con informar al Comité del CEDAW sobre las supuestas violaciones a los derechos humanos de las mujeres en Argentina (impedirles abortar legalmente). Según sus propios dichos, el informe lo está preparando con CLADEM y con el CELS, de Horacio Verbysky.  

La ex-diputada y funcionaria del Gobierno de la Ciudad, María Barbagelata, anunció la creación de un “observatorio” para vigilar el cumplimiento de los “derechos reproductivos” en la Ciudad, una especie de "KGB ginecológica". 

La senadora por Catamarca, Marita Colombo (Frente Cívico y Social), presentó un proyecto de pedido de informes sobre el retiro del Protocolo, y Mabel Bianco, la médica abortista que dirige el FEIM, insiste en presentación de notas al Senado y en presionar a los Senadores por todos los medios posibles. 

Según sus propias fuentes, los objetivos inmediatos del feminismo son: desacreditar a la Iglesia Católica y presionar a los medios de comunicación y a los senadores nacionales para la ratificación del Protocolo. Insisten en la inocuidad para la legalización del aborto de esa ratificación, aunque saben perfectamente que ese instrumento legal esclavizaría a nuestro país y lo obligaría a realizar los cambios legislativos que ordene el Comité de la ONU de seguimiento de la Convención, de allí el empeño que ponen. El Comité se ha caracterizado desde hace años por recomendar reiteradamente a muchos países, entre otras aberraciones, la despenalización del aborto. Para los países que han ratificado el Protocolo las recomendaciones del Comité se transforman en mandatos, por lo que son obligados a cambiar sus leyes. En estos días Nepal, ha tenido que autorizar legalmente el aborto, por mandato del Comité. 

A río revuelto ganancia de feministas 

Aunque la situación nacional es gravísima y el futuro del país es incierto, parecería que para el feminismo los Senadores de la Nación no tuvieran otros temas para tratar que los referidos a la sexopatía que lo caracteriza. 

Recordamos que el jueves 3 de enero de 2002, a menos de dos días del tercer reemplazo presidencial en una quincena, la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la Nación, que preside el senador Eduardo Menem, volvió a tratar el proyecto de ley de ratificación del Protocolo facultativo de la Convención para la Eliminación de toda Forma de Discriminación contra la Mujer.  

Como informamos, el Senador Menem, insistió en la solución de compromiso que había propuesto en noviembre pasado: sancionar el Protocolo con una declaración interpretativa que manifieste que la legislación argentina siempre respetará la "vida desde la concepción". El texto del protocolo dice explícitamente que no admite reservas y, por lo tanto, tampoco declaraciones interpretativas, por lo que la propuesta de Menem era inútil. Y además, la ONU puede, sencillamente, aceptar la ratificación rechazando la declaración interpretativa. 

¿Qué pretende el Senador Alfonsín? 

Sin embargo, el Senador Raúl Alfonsín ni siquiera aceptó esa solución de compromiso. Alfonsín dijo en esa reunión que si se hace una declaración interpretativa, deben omitirse las palabras "desde la concepción", “porque la mujer tiene derecho ante todo a su salud...”. A buen entendedor pocas palabras. En definitiva, ¿lo que Alfonsín pretende es despenalizar el aborto con la excusa del derecho a la salud de la mujer?. Además, el ex-presidente dijo que algunos obispos por él consultados no ven obstáculo en la sanción del protocolo, lo que es imposible, ya que la Conferencia Episcopal se expidió claramente en contra del protocolo en el mes de noviembre pasado. 

Necesidad de presionar 

También quienes defendemos la vida humana y la familia debemos hacer oir nuestra voz. Es necesario, entre otras cosas, hacer presentaciones dirigidas al presidente del Senado, pasando por mesa de entradas y presionar a los Senadores. A continuación, damos la versión completa de una esas notas que la Asociación Familias Numerosas (AFAN), presentó al Senado reclamando "el rechazo de la ratificación del Protocolo opcional o facultativo de la Convención para la eliminación de toda forma de discriminación contra la mujer” teniendo en cuenta que: 

"1) Respecto al derecho a la vida: la Convención “obliga a garantizar el acceso a los servicios de salud y de planificación familiar”. Y el Comité de seguimiento de la Convención, al que el Protocolo le asigna poder de intervención sobre los países, considera incluido en esos términos el 'aborto seguro', por lo que recomienda su despenalización y su legalización del aborto. De ésta manera por ejemplo, ha sugerido a Chile legalizar el aborto terapéutico y a Libia reinterpretar el Corán para despenalizar el aborto, entre otras muchas recomendaciones similares. 

"2) Respecto a la propia identidad personal la Convención propone 'eliminar todo concepto estereotipado de los papeles masculino y femenino en todos los niveles y en todas las formas de enseñanza (...) mediante modificaciones de libros y programas escolares y la adaptación de los métodos de enseñanza'. El Comité de seguimiento promueve la libre opción sexual, y así ha recomendado a Kigistán legalizar el lesbianismo, lo que consideramos una aberración.  

"A la vez, atenta contra la libertad de enseñanza y la libertad de conciencia, desconociendo el derecho de los padres de educar a sus hijos según sus propias convicciones, exigiendo la implementación de planes educativos basados en los principios enunciados, como sucedió con Colombia, Croacia, Islandia, y otros países. 

"3) Además, según lo dicho por la Sra. Angela King, asesora del secretario general de la ONU en temas de género, el Comité evaluará al Estado parte según la siguiente norma: 'Ninguna práctica tradicional, religiosa o cultural, ni las leyes locales incompatibles, pueden justificar las violaciones a la Convención, por lo tanto, las reservas introducidas por razones nacionales, tradicionales, religiosas, culturales son incompatibles con la Convención y por lo tanto impermisibles y deben ser repasadas, modificadas y retiradas' 

"Esta afirmación expresada el año pasado por la Sra. Angela King, que por su cargo tiene ingerencia directa sobre el Comité, anuncia de antemano atentados contra la soberanía nacional, la libertad religiosa y el patrimonio cultural de los países. Además deja claro que ninguna reserva ni declaración interpretativa hecha a la Convención sobre temas capitales como la defensa de la vida, será aceptada por la ONU, y mucho menos será admitido un documento de este tipo que afecte al Protocolo, ya que el texto de éste expresamente lo prohibe. 

"Por otro lado, -continúa AFAN-, denunciamos como falsa y carente de todo sentido jurídico la afirmación que sostiene que es necesario ratificar el Protocolo para que la Convención tenga plena vigencia. La Convención ya es parte de nuestra Constitución Nacional.  

"El Comité se reúne, delibera y hace recomendaciones desde hace años. Es decir que la Convención tiene plena vigencia sin la ratificación del Protocolo, a no ser que se considere inútil la Constitución Nacional, lo que esperamos no sea la opinión del Senado de la Nación. 

"La ratificación del Protocolo, le otorga al Comité un poder totalitario sobre los países que lo acepten, a los cuales ya no se les “recomendará” cambiar sus leyes y costumbres, sino que se les obligará a hacerlo. 

"Consideramos también de capital importancia tener en cuenta que el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de los Estados Unidos se ha negado reiteradamente a ratificar la Convención y, por supuesto, el Protocolo, al que el antiguo presidente de ese Comité, el senador Helms, llamó 'el instrumento internacional para la globalización del aborto'.  

"Por lo expuesto, solicitamos imperativamente a la Cámara de Sanadores de la Nación NO RATIFICAR EL PROTOCOLO OPCIONAL de la Convención para la eliminación de toda forma de discriminación contra la mujer". (Hasta aquí la nota). 

Otros rechazos 

El Instituto de Formación Docente Santa María de la Universidad Católica de Cuyo y el Consejo Arquidiocesano de San Juan de la Acción Católica Argentina, en notas diferentes, reclamaron también al Senado que no ratifique el Protocolo, entre otras cosas, porque no hay ninguna necesidad ni obligación de ratificarlo para que se cumpla la Convención de la mujer.  

Estas notas de rechazo se suman a las presentadas en los últimos meses por las asociaciones Mujeres por la Vida de Santa Fe, Convocatoria por la Vida de Santa Fe y Córdoba, el Movimiento Cívico de Mujeres, el Consorcio de Médicos Católicos de Buenos Aires, la Corporación de Abogados Católicos, Pro-Mujer de San Juan, etc. FIN 

RUEDA DE ENLACE DE ONG’s 

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NOTIVIDA, Año II, nº 77, 21 de mayo de 2002

Editores: Pbro. Dr. Juan C. Sanahuja y Lic. Mónica del Río

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